Naciones Unidas (N U) en vez de cumplir con sus objetivos de
mantener la paz mundial y la cooperación internacional entre los países, con la
resolución 1973, del Consejo de Seguridad, de fecha 17 de marzo 2011,
autorizando a la OTAN a “tomar todas las medidas necesarias” en Libia para
“proteger a los civiles y a las áreas pobladas bajo amenaza de ataques” ha
violado los principios de no injerencias en los asuntos internos de otros países.
La resolución 1973, se complementó con medidas
de embargo ya aprobadas en la resolución 1970, del 26 de febrero del mismo año.
Se acordó congelar activos, entre otros, la Nacional Oil Corporation y del
Banco Central Libio por su estrecha relación con Gadafi. NU en nombre de los
intereses de los países imperiales, ha legalizado la guerra preventiva contra
el pueblos del mundo, cuando éstos cometan el delito de Libia, no obedecer sus
ordenes, como la destitución de su presidente Gadafi. Los bombardeos contra
poblaciones civiles en Libia han agravado la crisis humanitaria y provocan la
destrucción sistemática de un país, ante la mirada complaciente del mundo.
Naciones Unidas se esta siendo responsables de
graves violaciones de derechos humanos y del derecho internacional humanitario,
su conducta se esta convirtiendo en impunidad.
Negó el acto al fuego propuesta nuevamente por Venezuela, por Libia cuando recibió la
visita del presidente de Sudáfrica Jacob Zuma. Respaldado por Rusia, China y
los países de la Unión Africana.
Basta del saqueo sistemático de las reservas
internacionales del pueblo Libio, de su petróleo y sus acuíferos subterráneos.
Esas riquezas no pertenecen a Gadafi, son de todo el pueblo libio. Hoy, es Libia mañana puede ser cualquier país
de los miembros de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo.
Germán Saltrón Negretti.
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