Venezuela
producía y exportaba café, cacao, azúcar, algodón, sarrapia, balata, madera,
dividive, papelón, ganado, cuero de res y tabaco desde 1810 hasta 1900. El
campesino era un siervo feudal desprovisto de tierras, estaba obligado a pagar
altos precios como arrendatario, colono o pisatario o a trabajar como peón con
salarios miserables.
En
Venezuela el petróleo empezó a cambiarlo todo a partir de 1917. En el año 1922 el reventón
petrolero en la parte oriental del Lago de Maracaibo, en el campo que explotaba
la compañía Venezuelan Oíl Concessions atrajo a nuevos inversionistas. Juan
Vicente Gómez comenzó la entrega de nuestras riquezas petroleras a las
potencias anglosajonas especialmente a los Estados Unidos.
Para 1936 se producían en el país 24 millones de
toneladas métricas de petróleo. El régimen legal de exportación de los
hidrocarburos venezolanos se basaba en leyes que habían redactados abogados
contratados por las propias empresas petroleras. Cuando
murió Gómez Venezuela ya era una factoría petrolera pero prevalecían los rasgos
del atraso y del subdesarrollo. Enfermedades tales como el paludismo, sífilis,
la tuberculosis diezmaban la población.
Los
países capitalistas saben desde hace un siglo, de la importancia de ser dueño
del petróleo para adueñarse del mundo. El petróleo es fundamental para
entender la política venezolana y
mundial en el último siglo. La historia del mundo contemporánea es la historia de las pugnas entre las compañías
petroleras y los políticos progresistas en los países petroleros.
Desde
que el Presidente Chávez llega al poder recuperamos nuestra plena soberanía
petrolera. El único presidente que ha enseñado a su pueblo la importancia de
nuestro petróleo. El patriotismo, valentía y solidaridad demostrada ha
ocasionado que este gobierno sea el más acechado, amenazado y agredido por el
gobierno de Estados Unidos y sus lacayos venezolanos para apoderarse del
petróleo como sea. Todas y todos debemos estar dispuestos a defender nuestra
riqueza petrolera con las armas si fuera necesario, porque los imperios ahora no quieren petróleo
barato sino regalado y están dispuestos a invadir los países petroleros como
sucedió con el pueblo libio.
Germán Saltrón Negretti.
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