La abogada sudafricana Rashida Manjoo Relatora de
la ONU para la violencia contra las mujeres, expuso recientemente en una
excelente declaración la gravedad del tema. La reproduzco para ayudar a crear
consciencia mundial sobre esta “epidemia”. En su visita a Madrid, para una
conferencia inaugural de las jornadas “Iberoamericana frente al feminicidio: El
fin de la impunidad”.
“La violencia contra la mujer es la principal infracción
contra los derechos humanos, 72 mujeres fueron asesinadas en España el año
pasado. Y cien mil mujeres han solicitado protección. No estoy aquí como
relatora, no vengo a examinar el caso español. Pero sí le digo que la violencia
doméstica es un problema global, no es algo que ocurra sólo en los países
pobres, o en los ricos; no es un tema que afecte a personas blancas o negras. Y
no hay un solo país del mundo que pueda afirmar que ha logrado erradicar la
violencia contra las mujeres. Todos tienen ese reto por delante.
¿Qué lección tiene en año y medio, que lleva
recorriendo el mundo vigilando la violencia contra las mujeres? Que la forma
más extendida de violencia contra las mujeres es la doméstica. La batalla
diaria de las mujeres en el hogar. Y no hay un solo país que esté combatiendo
esta lacra con éxito. Además, la violencia no siempre la perpetra la pareja,
también hay otros miembros de la familia entre los agresores. No hablo de
jerarquías dentro de la violencia doméstica, sino más bien de entender que es
un problema más amplio de lo que a veces se piensa.
¿Qué pueden hacer terceros países como España para
ayudar a rebajar esa altísima impunidad en los países? Creo que se puede ayudar
a los Gobiernos y a la sociedad. No sólo con dinero, sino también apoyo técnico
para poder implementar leyes que resulten eficaces. Pueden, por ejemplo ayudar
a las víctimas, darles asesoría y crear ámbitos de protección que permitan a
los testigos, por ejemplo, ayudar a resolver estos casos. Muchas de estas mujeres
no tienen posibilidad de iniciar un proceso judicial y eso favorece la
impunidad.
Hay quienes sostienen que erradicar la violencia
doméstica es más complicado que luchar contra una enfermedad de las denominadas
‘raras’ ¿Piensa igual? Todavía no hemos decretado una pandemia internacional en
relación a la violencia doméstica, como sí ocurrió con la Gripe A (sonríe) (…) ¿Cuál
sería el mensaje que la relatora de la ONU dejaría a una mujer que sufre malos
tratos? Que busque ayuda. Que alce su voz. No digo dónde debe pedir ayuda, pero
sí que hablen de ello. Es el primer paso”.
En Venezuela fue aprobada la Ley Orgánica sobre el
Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y no fue concebida para
amenazar o manipular al hombre, ni tampoco es sexista, solo tiene por finalidad
proteger a las mujeres de los hombres que utilizan la violencia. Como lo expone
la magistrada Yolanda Jaimes Guerrero, coordinadora de la Comisión Nacional de
Justicia de Género del Poder Judicial, “El
hombre que es buen compañero, esposo, concubino o amigo es nuestro aliado y bienvenido a la lucha por la
emancipación de los derechos de la mujer”.
Germán Saltrón Negretti.
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