Intervención del Sr. Germán Saltrón
Negretti
Director
Conferencia
Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial , la Xenofobia y las Formas
Conexas de Intolerancia
Durban, Sudáfrica
31 de agosto - 7
de septiembre 2001
Señor Presidente
de la Comisión
de Derechos Humanos de Sudáfrica
Permítame en
nombre de la Defensoría
del Pueblo de la
República Bolivariana de Venezuela, expresar nuestro
agradecimiento por la oportunidad que nos brinda para fijar nuestra posición,
en esta histórica Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial ,
la Xenofobia
y otras formas Conexas de Intolerancia.
Igualmente,
felicitamos a la señora Mary Robinson, Alta Comisionada de las Naciones Unidas
para los Derechos Humanos, como Secretaria General de la Conferencia Mundial.
La Defensoría del Pueblo es una Institución con rango constitucional que tiene
la transcendente tarea de promocionar, defender y vigilar los derechos y garantías
establecidos en la
Constitución de la República y en los Tratados Internacionales sobre
Derechos Humanos, así como representar los intereses legitimos, colectivos o
difusos de los ciudadanos. La
Defensoría del Pueblo es un órgano público pero con
independencia financiera y administrativa, no sujeta a ningún órgano del
Estado. La Defensoría
del Pueblo representa la institución del Ombusdman sueco, que ha sido
incorporada por otros países de América Latina. Saludamos fraternalmente a los
representantes de las Defensorías de Colombia, a su defensor Eduardo Cifuentes
Muñoz, al representante de la Defensoría de Argentina Ricardo Mario Scoles, a la Defensoría de México
Rodolfo Lara Ponte, a la
Defensoría del Perú, Roberto Pereira Chumbe, y a las
Defensorias de Guatemala y Honduras.
Nuestra novedosa
Constitución es la mas avanzada en reconocimiento de Derechos Humanos,
establece que nuestra sociedad es multiétnica y pluricultural, producto de la
fusión de etno culturas e idiosincrasias en cuya formación se cruzan tres razas
primigenia de América, la Indígena, la negra y la blanca. Los venezolanos
estamos orgullosos de este mestizaje. La legislación venezolana consagra la
igualdad de todos los ciudadanos ante la ley. No existe discriminación alguna
basada en raza, idioma o religión. Venezuela condena todas las formas de
discriminación. Por primera vez, en la historia de Venezuela el Estado reconoce
en una Constitución la existencia de comunidades indígenas con derechos propios
en su forma de vivir y en sus tierras, derecho de propiedad colectiva sobre las
tierras ancestrales que siempre han ocupado.
Asimismo,
Venezuela es un país de migrantes quienes se han integrado con armonía a
nuestra sociedad. Sus derechos han sido extendidos hasta la participación
política, logrando ocupar cargos de importancia en los Poderes Públicos. Hemos
reconocido la doble nacionalidad que ayuda a fomentar la integración y el
reconocimiento a los ciudadanos de otros países.
En Venezuela
creemos que la lucha contra el racismo y la xenofobia comienza con el respeto a
los derechos humanos de todos los grupos objetos de algún tipo de
discriminación, es decir de los pueblos indígenas, los inmigrantes y las minorías
étnicas, religiosas, culturales y lingüística. Esperamos que al concluir esta
convención surja un Plan de Acción que fortalezca los Derechos Humanos y
preserve la paz del mundo.
Muchas Gracias.
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