09 de febrero de 2017
Crédito: RT
El
Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de EE.UU. ha dictaminado
en contra del decreto de Donald Trump que pretende reducir el flujo
migratorio al país.
El
Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de EE.UU., con sede en
San Francisco, ha dictaminado mantener la suspensión del decreto de
Donald Trump que prohíbe la entrada a EE.UU. a inmigrantes
procedentes de siete países con mayoría musulmana, informa Voice
of America. El punto final en este caso lo puede poner la
Corte Suprema.
Por
su parte, el mandatario ya ha respondido a la reciente decisión
judicial a través de su cuenta de Twitter. "Nos vemos en el
tribunal, ¡la seguridad de nuestra nación está en juego!", ha
aseverado Trump. La polémica iniciativa del presidente
estadounidense suspende el programa de admisión de todos los
refugiados y la llegada de inmigrantes provenientes de Irak, Siria,
Irán, Sudán, Libia, Somalia y Yemen.
Bloqueo
al decreto presidencial
El
3 de febrero James
Robart, juez de una Corte Federal de la ciudad de Seattle
(Washington), dictaminó una
orden que deja sin efecto temporalmente el decreto de Trump. Los
abogados del Gobierno federal, por su parte, declararon que la
decisión del juez era excesivamente amplia y debía ser anulada.
El
Departamento de Justicia de EE.UU. apeló de manera formal la
decisión del tribunal de Seattle el 4 de febrero. Sin embargo, el
Tribunal de Apelaciones de EE.UU. denegó el 5 de febrero la
solicitud de restablecimiento del veto temporal y concedió un plazo
hasta este lunes para que la Casa Blanca presente más argumentos que
apoyen su apelación. Asimismo, el Departamento de Justicia
volvió a presentar una
apelación en apoyo al "ejercicio legal" de la autoridad
presidencial.
El
Tribunal de Apelaciones denegó la solicitud basándose en
el fallo del
juez Robart, que indica que la orden ejecutiva afecta negativamente a
los residentes estadounidenses "en las áreas del empleo, la
educación, los negocios, las relaciones familiares y la libertad de
viajar", además de perjudicar a las universidades públicas
y la base tributaria.
El
decreto de la discordia
Durante
la sesión que se celebró el martes para revisar la orden del juez
Robart y estudiar la posibilidad de restaurar el controvertido veto
de Trump, el fiscal del Departamento de Justicia, August Flentje,
afirmó que el decreto en cuestión estaba en el marco de los poderes
de Trump garantizados por el Congreso y la Constitución.
Sin
embargo, el fiscal general del estado de Washington, Noah Purcell,
indicó que la medida sumergiría al país en el "caos" y
ya ha separado a las familias, infundiendo incertidumbre entre
quienes permanecen en EE.UU. sin saber si pueden viajar o abandonar
el país y aún contar con la posibilidad de regresar. Además, se
reiteró que el decreto perjudica al comercio, a universidades y
bloquea la entrada al país de manera inconstitucional por motivos de
religión.
El
presidente de la organización Vamos Unidos USA, Juan José
Gutiérrez, sostiene que las órdenes ejecutivas de Donald Trump
amenazan a todos los inmigrantes, sean de Oriente Medio o de América
Latina.
El
Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de EE.UU., con sede en
San Francisco, ha dictaminado mantener la suspensión del decreto de
Donald Trump que prohíbe la entrada a EE.UU. a inmigrantes
procedentes de siete países con mayoría musulmana, informa Voice
of America. El punto final en este caso lo puede poner la
Corte Suprema.
Por
su parte, el mandatario ya ha respondido a la reciente decisión
judicial a través de su cuenta de Twitter. "Nos vemos en el
tribunal, ¡la seguridad de nuestra nación está en juego!", ha
aseverado Trump. La polémica iniciativa del presidente
estadounidense suspende el programa de admisión de todos los
refugiados y la llegada de inmigrantes provenientes de Irak, Siria,
Irán, Sudán, Libia, Somalia y Yemen.
Bloqueo
al decreto presidencial
El
3 de febrero James
Robart, juez de una Corte Federal de la ciudad de Seattle
(Washington), dictaminó una
orden que deja sin efecto temporalmente el decreto de Trump. Los
abogados del Gobierno federal, por su parte, declararon que la
decisión del juez era excesivamente amplia y debía ser anulada.
El
Departamento de Justicia de EE.UU. apeló de manera formal la
decisión del tribunal de Seattle el 4 de febrero. Sin embargo, el
Tribunal de Apelaciones de EE.UU. denegó el 5 de febrero la
solicitud de restablecimiento del veto temporal y concedió un plazo
hasta este lunes para que la Casa Blanca presente más argumentos que
apoyen su apelación. Asimismo, el Departamento de Justicia
volvió a presentar una
apelación en apoyo al "ejercicio legal" de la autoridad
presidencial.
El
Tribunal de Apelaciones denegó la solicitud basándose en
el fallo del
juez Robart, que indica que la orden ejecutiva afecta negativamente a
los residentes estadounidenses "en las áreas del empleo, la
educación, los negocios, las relaciones familiares y la libertad de
viajar", además de perjudicar a las universidades públicas
y la base tributaria.
El
decreto de la discordia
Durante
la sesión que se celebró el martes para revisar la orden del juez
Robart y estudiar la posibilidad de restaurar el controvertido veto
de Trump, el fiscal del Departamento de Justicia, August Flentje,
afirmó que el decreto en cuestión estaba en el marco de los poderes
de Trump garantizados por el Congreso y la Constitución.
Sin
embargo, el fiscal general del estado de Washington, Noah Purcell,
indicó que la medida sumergiría al país en el "caos" y
ya ha separado a las familias, infundiendo incertidumbre entre
quienes permanecen en EE.UU. sin saber si pueden viajar o abandonar
el país y aún contar con la posibilidad de regresar. Además, se
reiteró que el decreto perjudica al comercio, a universidades y
bloquea la entrada al país de manera inconstitucional por motivos de
religión.
El
presidente de la organización Vamos Unidos USA, Juan José
Gutiérrez, sostiene que las órdenes ejecutivas de Donald Trump
amenazan a todos los inmigrantes, sean de Oriente Medio o de América
Latina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario