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Unos funcionarios de alto rango de los Estados Unidos terminaron recientemente sus visitas grupales a las áreas circundantes de China. Desde la visita de la subsecretaria de Estado, Wendy Sherman, a Japón, República de Corea, Mongolia y China, hasta la visita del secretario de Estado, Antony Blinken, a la India y la visita del secretario de Defensa, Llyd Austin, a tres países del sudeste asiático, varios altos funcionarios estadounidenses cruzaron el Pacífico hasta la puerta de China para provocar discordia y forzar la llamada estrategia del Indo-Pacífico, su intención para crear un "círculo de contención a China" es obvia y clara.
Aunque Sherman afirmó durante su visita a China que Estados Unidos no busca contener el desarrollo de China, los hechos han demostrado que Estados Unidos habla de una manera, pero obra de otra. Por ejemplo, Austin, como el primer miembro del gabinete del actual Gobierno de EE. UU., al visitar el sudeste asiático, confundió lo blanco con lo negro al respecto del Mar Meridional de China, Taiwan, Xinjiang y otros temas en un foro en Singapur, exagerando la llamada amenaza china con la intención de provocar discordias en las relaciones entre China y los países vecinos.
El próximo viaje de Austin a Vietnam y Filipinas demuestra aún más el intento de Estados Unidos de engatusar a países del sudeste asiático para contener a China. Austin prometió que Estados Unidos ayudará a Vietnam a mejorar sus capacidades de seguridad marítima y proporcionará equipo militar; también presionó a Filipinas para que retirara su decisión de "abolir el acuerdo clave de defensa entre Estados Unidos y Filipinas", que permite la entrada de un gran número de tropas estadounidenses para participar en ejercicios conjuntos de combate.
Además de países vecinos de China, como la India y Japón, Estados Unidos también ha aumentado sus recursos militares y políticos en otros países del sudeste asiático que ocupan una posición relativamente intermedia. Al mismo tiempo, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, pregonó los "intereses comunes de seguridad regional" en la India y promovió de manera integral la estrategia del Indo-Pacífico y el "mecanismo de cuatro naciones".
En la actualidad, las relaciones entre China y los países vecinos son buenas en general, y la búsqueda de la paz y el desarrollo es la aspiración común de los países de la región. China ha tomado la iniciativa en la ratificación de uno de los acuerdos comerciales más grandes del mundo iniciado por la ASEAN, el Acuerdo de Asociación Económica Regional Integral (RCEP), y ha hecho todo lo posible para proporcionar a los países de la ASEAN vacunas de nuevo coronavirus y apoyar a los países de la ASEAN en establecer centros regionales de producción y distribución de vacunas. China ha demostrado con acciones prácticas qué es un "buen vecino, buen amigo y buen socio".
Los vecinos cercanos valen más que los parientes lejanos. China comprende mejor que Estados Unidos las verdaderas ideas y demandas de los países vecinos. El intento de Estados Unidos de instigar las relaciones vecinas de China no surtirá ningún efecto.
De hecho, la visita de Sherman a China debe traer de vuelta las "dos listas", las "tres líneas rojas" y las "cuatro paradas" propuestas por China. Los formuladores de políticas estadounidenses deben estudiar cuidadosamente las preocupaciones y propuestas de China, cambiar la percepción extremadamente errónea sobre China y la política extremadamente peligrosa para con China, dejar de tratar a China como un "enemigo imaginario" y no hablar de cooperación en la superficie, pero dedicarse a la confrontación en realidad y dejar el "círculo de contención" a China. Cabe señalar que una relación chino-estadounidense sana y estable no solo corresponde con interés de ambas partes, sino también con la expectativa común de la comunidad internacional.
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