La India envió varias docenas de soldados a Rusia para capacitarlos en el manejo del sistema antiaéreo S-400 que prevé comprar. Sin embargo, es poco probable que esto sea del agrado de Washington, que considera a Nueva Delhi un socio clave en la estrategia Indo-Pacífica, escribe el diario japonés Nikkei Asia.
Los medios indios informaron que un grupo de 100 oficiales de ese país viajará a Rusia en enero para capacitarse en el manejo de los avanzados sistemas antiaéreos S-400.
Se prevé que la India recibirá las primeras baterías antiaéreas entre septiembre y octubre de 2021 y estarán operativas a finales de este mismo año o principios del próximo.
En octubre de 2018, la India selló un contrato con la corporación rusa Rosoboronexport para la compra de cinco sistemas antiaéreos S-400 por más de 5.400 millones de dólares.
Según el diario japonés, "la India se apresura a reforzar sus fuerzas armadas, en parte debido a la prolongada disputa con China por un tramo de frontera que se intensificó el pasado mes de mayo".
No obstante, los planes de adquirir los sistemas antiaéreos S-400 provocaron tensiones entre la India y Estados Unidos.
"La venta será sin duda un punto doloroso en las relaciones indo-estadounidenses, especialmente por el hecho de que Rusia está desarrollando una cooperación militar con la India", comenta el diario.
De acuerdo con el artículo, la compra de los S-400 por parte de la India amenaza con empeorar las relaciones con el nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden. La Administración Trump había instado repetidamente a la India a reconsiderar el acuerdo con Rusia.
Anteriormente, Estados Unidos ya había impuesto sanciones a Turquía por la compra de los S-400, que Ankara recibió en julio de 2019, recuerda el medio.
Por un lado, la India compra tradicionalmente armas a Rusia, observa la publicación. Por otro lado, forma parte, junto con Estados Unidos, Japón y Australia, de la llamada alianza QUAD.
De acuerdo con el diario, no se puede descartar que la compra de los S-400 por parte de la India tenga un impacto en la política de Biden hacia el país.
En particular, el Gobierno indio prevé que la atención de Biden a los derechos humanos afectará la política estadounidense hacia su país. En 2019 y 2020 estallaron grandes manifestaciones en la India en respuesta a la polémica ley de ciudadanía.
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