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El 16 de enero de 1969 se llevó a cabo el primer acoplamiento pilotado de dos naves espaciales y el traspaso de cosmonautas entre ellas. Fue un hito histórico que hizo posible la creación de la Estación Espacial Internacional (EEI) y abrió el camino a la exploración del espacio. Durante la gran rueda de prensa que se celebró con motivo del 50 aniversario de este importante acontecimiento, sus protagonistas revelaron el drama que rodeó la heroica misión y cómo el cosmonauta Borís Volinov logró escapar de la muerte.
El hito que abrió el camino a la EEI
El objetivo primordial y la importancia del acoplamiento de naves espaciales pilotadas radicaban en la posibilidad de crear estaciones espaciales, sin las cuales no serían posibles los viajes a la Luna y otros cuerpos espaciales.
El 16 de enero de 1969 se llevó a cabo el primer acoplamiento pilotado de dos naves espaciales y el traspaso de cosmonautas entre ellas. Fue un hito histórico que hizo posible la creación de la Estación Espacial Internacional (EEI) y abrió el camino a la exploración del espacio. Durante la gran rueda de prensa que se celebró con motivo del 50 aniversario de este importante acontecimiento, sus protagonistas revelaron el drama que rodeó la heroica misión y cómo el cosmonauta Borís Volinov logró escapar de la muerte.
El hito que abrió el camino a la EEI
El objetivo primordial y la importancia del acoplamiento de naves espaciales pilotadas radicaban en la posibilidad de crear estaciones espaciales, sin las cuales no serían posibles los viajes a la Luna y otros cuerpos espaciales.
El objetivo primordial y la importancia del acoplamiento de naves espaciales pilotadas radicaban en la posibilidad de crear estaciones espaciales, sin las cuales no serían posibles los viajes a la Luna y otros cuerpos espaciales.
Public Domain / NASA
En realidad, las naves Soyuz 4 y 5 se convirtieron en la primera estación espacial de la historia y abrieron las puertas a la creación de estaciones más grandes, como la Mir o la EEI.
Previamente hubo varios intentos de acoplar dos naves pilotadas, pero todos fracasaron. De hecho, la primera misión realizada en 1967 se saldó con la muerte del cosmonauta Vladímir Komarov cuya nave —la Soyuz 1— se estrelló durante el aterrizaje. Aunque las siguientes misiones no tuvieron víctimas mortales, solo al tercer intento hubo suerte con la nave Soyuz 4, pilotada por Vladímir Shatálov, y la Soyuz 5, con tres cosmonautas a bordo: Alexéi Eliséev, Evgueni Jrúnov y Borís Volinov.
Previamente hubo varios intentos de acoplar dos naves pilotadas, pero todos fracasaron. De hecho, la primera misión realizada en 1967 se saldó con la muerte del cosmonauta Vladímir Komarov cuya nave —la Soyuz 1— se estrelló durante el aterrizaje. Aunque las siguientes misiones no tuvieron víctimas mortales, solo al tercer intento hubo suerte con la nave Soyuz 4, pilotada por Vladímir Shatálov, y la Soyuz 5, con tres cosmonautas a bordo: Alexéi Eliséev, Evgueni Jrúnov y Borís Volinov.
© Sputnik / Alexander Mokletsov
Las tripulaciones de las naves Soyuz 4 y 5. De izquierda a derecha: Vladímir Shatálov, Borís Volinov, Evgueni Jrúnov y Alexéi Eliséev.
Comienzo exitoso, final dramático
La Soyuz 4 despegó el 14 de enero de 1969 y la Soyuz 5 al día siguiente para llevar a cabo el acoplamiento el 16 de enero. Fue el primer acoplamiento pilotado de la historia y se realizó según lo planeado.
Momentos del acoplamiento de las naves espaciales Soyuz 4 y 5. En el minuto 1:55 se presenta una ilustración de cómo los cosmonautas pasaron entre las naves.
Sin embargo, cuando las naves se acercaron tuvieron que permanecer a una distancia de 30 metros entre sí hasta que estuviesen al alcance de las señales de radio en la URSS y pudiesen así transmitir en directo las imágenes de su vuelo.
Después de ello, los cosmonautas tuvieron que pasar de una nave a la otra. No obstante, no fue una tarea tan fácil como lo es hoy en día. Las naves no disponían de una compuerta en el punto de acoplamiento, que consistía de un dispositivo especial para mantenerlas acopladas.
CC BY-SA 3.0 / Lunokhod 2
Una ilustración de las dos naves acopladas. Los cosmonautas tuvieron que hacer uso de las barandillas para desplazarse entre las naves.
Para ello, Eliséev y Jrúnov tuvieron que salir al espacio abierto y desplazarse hasta la nave Soyuz 4 para meterse dentro de ella. Para marcar la importancia de este hito, los cosmonautas le llevaron a Shatálov una correspondencia y el periódico, donde él mismo figuraba en la portada.
© Sputnik / V. Lebedev
El cosmonauta Shatálov recibe a los tripulantes de la Soyuz 5 a bordo de la nave Soyuz 4.
Curiosamente, el cosmonauta Alexéi Eliseév contó que estuvieron a punto de "olvidar el correo en casa".
"Casi llegamos a dejar las cartas y los periódicos en el Soyuz 5, pero Volinov se acordó de ello en el último instante, y los metió por el cinturón del escafandro de Jrúnov. De hecho, el periódico incluso se rompió un pocoLas naves permanecieron acopladas durante 4 horas y 35 minutos antes de separarse para realizar el aterrizaje.
Cara a cara con la muerte.
La primera en descender fue Soyuz 4, que ya tenía a tres tripulantes en vez del único cosmonauta que había llevado al espacio. El aterrizaje ocurrió el 17 de enero y transcurrió sin percances.
Pero las cosas no fueron tan bien al día siguiente para la Soyuz 5 con Borís Volinov a bordo. Durante el aterrizaje no funcionaron las cargas explosivas que debían separar a la nave principal de la cápsula de aterrizaje. El cosmonauta sabía que esta era su sentencia de muerte.
También lo sabían en el centro de control de vuelos, donde incluso empezaron a recolectar el dinero para su funeral.
© Sputnik / Ivan Denisenko
El comandante de Soyuz 5, Borís Volinov, dentro de la nave. Aun no sabe que durante el aterrizaje estará a punto de morir.
Al seguir anclada a la nave principal, la cápsula empezó a descender con una trayectoria balística que no estaba prevista y sometió al cosmonauta a sobrecargas de hasta 10G.
Además de ello, se sobre calentó por estar orientada indebidamente. Según relató el propio Volinov, la nave estaba tan caliente que partes de ella empezaron a fundirse emitiendo humo que él inhalaba.
© Sputnik
Volinov integraba la primera escuadra de cosmonautas junto con Yuri Gagarin, el primer hombre en volar al espacio.
De hecho, la temperatura llegó a ser tan alta que la nave principal se separó de la cápsula porque los acoplamientos metálicos que las unían se fundieron. Por un momento Volinov sintió alivio, pero sus problemas no acabaron allí.
De hecho, la temperatura llegó a ser tan alta que la nave principal se separó de la cápsula porque los acoplamientos metálicos que las unían se fundieron. Por un momento Volinov sintió alivio, pero sus problemas no acabaron allí.
Debido a la trayectoria balística de descenso, la nave rotaba intensamente y cuando se abrió el paracaídas, este se enredó. En estos momentos Volinov decidió que tenía que hacer todo lo posible para ayudar a la comisión que investigaría su muerte y prevenir las de otros cosmonautas.
Debido a la trayectoria balística de descenso, la nave rotaba intensamente y cuando se abrió el paracaídas, este se enredó. En estos momentos Volinov decidió que tenía que hacer todo lo posible para ayudar a la comisión que investigaría su muerte y prevenir las de otros cosmonautas.
Así que comenzó a hacer una grabación en la que contaba en detalles sobre todo lo que estaba ocurriendo con la nave. También tomó el libro de vuelo, arrancó las páginas más importantes y las metió en medio del libro, para que tuviesen más probabilidades de se salvarse en caso de un incendio. Además, envolvió el libro en un trapo.
Así que comenzó a hacer una grabación en la que contaba en detalles sobre todo lo que estaba ocurriendo con la nave. También tomó el libro de vuelo, arrancó las páginas más importantes y las metió en medio del libro, para que tuviesen más probabilidades de se salvarse en caso de un incendio. Además, envolvió el libro en un trapo.
© Roscosmos
Un aterrizaje correcto de la nave Soyuz con el paracaídas completamente abierto.
Afortunadamente el paracaídas permaneció parcialmente abierto, ralentizando así la caída. Pero el mayor impacto aún estaba por venir. Los motores de freno se activaron demasiado tarde y no lograron propulsar la cápsula al aproximarse a la superficie.
Afortunadamente el paracaídas permaneció parcialmente abierto, ralentizando así la caída. Pero el mayor impacto aún estaba por venir. Los motores de freno se activaron demasiado tarde y no lograron propulsar la cápsula al aproximarse a la superficie.
El golpe fue tan violento que Volinov sufrió una lesión grave en la mandíbula superior: se le rompieron todos los dientes. Según lo contó el propio cosmonauta, durante todo el descenso creyó que no iba a sobrevivir.
El golpe fue tan violento que Volinov sufrió una lesión grave en la mandíbula superior: se le rompieron todos los dientes. Según lo contó el propio cosmonauta, durante todo el descenso creyó que no iba a sobrevivir.
Con un intenso dolor de dientes y aturdido por el violento aterrizaje, Volinov se vio en medio de un campo a 30 ℃ bajo cero.
Con un intenso dolor de dientes y aturdido por el violento aterrizaje, Volinov se vio en medio de un campo a 30 ℃ bajo cero.
Public Domain
"¡La Patria está orgullosa de Ustedes, héroes del espacio!"
Los pensamientos sobre la inminente muerte volvieron a su cabeza. Debido a que aterrizó a una distancia de 600 kilómetros de la zona planeada, los equipos de rescate tardaron varias horas en encontrarlo.
A pesar de las lesiones, tres días más tarde todos los cosmonautas que participaron en la primera misión de acoplamiento pilotado de naves espaciales atendieron al Kremlin para reportar a los altos mandos el éxito de la misión.
© Sputnik / A. Polikashin
Los integrantes de las naves Soyuz 4 y Soyuz 5 de camino al Kremlin tras volver a la Tierra.
Curiosamente, durante la rueda de prensa Volinov compartió un hecho poco conocido sobre los "desfiles espaciales" en el Kremlin.
"Pocos lo saben, pero fuimos los últimos en presentarnos en público en las calles de Moscú estando de camino al Kremlin después de realizar misiones espaciales"
© Sputnik / Valeri Melnikov
¿Quedan aún retos por superar en el espacio?
En la rueda de prensa el corresponsal de Sputnik pidió a los protagonistas de esta histórica misión que nombraran los retos que quedan por superar en el espacio y el futuro de la cosmonáutica.
Public Domain / NASA
Borís Volinov dijo que la mayor parte del trabajo aún está pendiente, al igual que toda la historia de la cosmonáutica.
"Hemos superado una pequeña parte del camino y lo que hicimos solo han sido los primeros pasos. Es interesante, es arriesgado y es sorprendente que pudiéramos alcanzar a aquellos logros"
© Sputnik / Valeri Melnikov
Con ello, señaló que a pesar de los hitos en el ámbito espacial aún quedan problemas por solucionar y serán los jóvenes los que tendrán que hacerlo, lo cual "es fantástico".El otro protagonista del histórico logro, Alexéi Eliseév, comparte el punto de vista de Volinov y dijo a Sputnik que la exploración espacial es parte de la naturaleza humana.
© Sputnik / Vladimir Astapkovich
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