El futuro de Colombia no se puede concebir sin la verdad de lo ocurrido en el conflicto armado.
hace 1 min. CREDITO SPUTNIK.
© Foto : CEV
La COMISION DE LA VERDAD entrego este 28 de junio el Informe Final con el que explica lo sucedido en casi seis décadas de guerra, las causas y consecuencias, todo en las voces de las víctimas y otros actores. El presidente electo Gustavo Petro recibió las recomendaciones y se comprometió a implementarlas. Sputnik estuvo presente.
Fueron tres años y siete meses de recorrer el país, de escuchar 28.543 relatos a través de 14.918 entrevistas, de ir a los lugares más lejanos de Colombia para darle voz a quienes no la tuvieron durante la guerra (559 municipios visitados). Fue, en otras palabras, un periodo de silencios para que los actores del conflicto contaran, desde sus adentros, las historias y versiones. Y sus dolores.
Así fue el trabajo de la Comisión de la Verdad, así fue el mandato de esta institución que nació con el Acuerdo de Paz firmado con la extinta guerrilla de las FARC (2016), y que este 28 de junio de 2022 le entregó a la nación su Informe Final, un documento que recoge las causas y las piezas, las verdades ocultas y las consecuencias de una lucha que por poco llega a la seis décadas. Un documento amplio que ratifica que reconocer la verdad es doloroso, pero algo necesario para garantizar la no repetición.
La ceremonia inició con algunos testimonios que se recogieron durante este periodo, un resumen del trabajo y del amplio despliegue territorial que se realizó, no sin antes dar a conocer que el presidente Iván Duque se excusó por su inasistencia al estar fuera del país (hubo abucheos), y dar las gracias por la presencia del presidente electo, Gustavo Petro, y su vicepresidenta, Francia Márquez.
"Traemos un mensaje de esperanza y futuro para nuestra nación rota. Un mensaje para todos y todas como seres humanos más allá de nuestras diferencias. Y verdades incómodas. Traemos una palabra que viene de escuchar y sentir a las víctimas, de oír a quienes luchan por mantener la memoria y a quienes han aceptado las responsabilidades éticas y penales", dijo el padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión, con una voz frágil en tonalidad, pero fuerte por sus palabras, por sus preguntas reflexivas.
"¿Por qué los colombianos y colombianas dejamos pasar este despedazamiento? ¿Por qué vimos las masacres por televisión como si fueran una novela barata? ¿Cómo permitimos que esto pasara y cómo nos podemos atrever a permitir que continúe? Es obligatorio comprometernos con la reparación integral, incorporar la memoria del sufrimiento y la lucha para hacer posible ese nunca más. Nos tomaría 17 años dar un minuto para honrar a cada una de las víctimas de esta guerra", enfatizó De Roux.
Durante 1308 días, 13 comisionados hicieron una relatoría minuciosa, a pesar de la polarización del país, y hablaron con excombatienes, militares, víctimas, organizaciones y colectivos sociales. Incluso se reunieron con expresidentes de la República para conocer sus versiones de los hechos y el actuar que tuvieron desde el poder. El 16 de octubre de 2019 escucharon a Ernesto Samper (1994-1998); el 11 de noviembre de 2020, a César Gaviria (1990-1994); el 11 de junio del 2021, a Juan Manuel Santos (2010-2018); el 16 de agosto del mismo año, a Álvaro Uribe (2002-2010) y por último, el 31 de agosto, a Andrés Pastrana (1998-2002). La finalidad era clara y superior a cualquier diferencia pragmática y política.
Padre Francisco de Roux durante su intervención
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"Es un conflicto en el que el 80% de las víctimas eran civiles y no combatientes. Por eso llamamos a sanar el cuerpo físico y simbólico de todas y todos los que formamos esta nación. Convocamos a proteger los derechos humanos y a las entidades para que le sirvan a la ciudadanía", agregó De Roux.
A pesar de la pandemia, que obligó a aumentar su mandato, la Comisión de la Verdad no se detuvo en su trabajo para construir un texto que consta de 10 capítulos divididos de la siguiente forma: Narrativa histórica del conflicto (1), violaciones a los Derechos Humanos y al Derecho Internacional Humanitario (2); mujeres y la comunidad LGBTI en el marco de la guerra (3); niños, niñas y adolescentes como víctimas (4); el exilio (5) —capítulo novedoso porque nunca antes se había hablado de quienes tuvieron que salir del país—; voces y testimonios —que tendrá un banco sonoro— (6); territorial y cómo los actores se comportaron en diferentes regiones (7); impactos, afrontamientos y resistencias (8); impactos en la población étnica (9) y la síntesis, hallazgos y recomendaciones (10). Este último fragmento fue el primero que entregó la Comisión.
"Colombia tiene la riqueza conmovedora de su pueblo, la profundidad de sus tradiciones espirituales y la tenacidad laboral y empresarial para que satisfagan la vida anhelada. Estamos convencidos que hay un futuro para construir, juntos, en medio de nuestras diferencias. Y por eso no podemos postergar el día en el que la paz sea un deber y un derecho obligatorio cumplimiento", añadió De Roux.
Conclusiones del Informe Final
Durante la ceremonia, que tuvo lugar en el teatro Jorge Eliécer Gaitán, en el centro de Bogotá, la Comisión habló de las recomendaciones que trae consigo el informe y dirigidas a siete sectores del Estado. De Roux le entregó el abultado documento al presidente electo, Gustavo Petro.
"Leeré las recomendaciones que se le hacen al pueblo colombiano, al estado y a toda la sociedad. Hay expectativas de paz, una paz grande y pasar a una nueva era en el país en el que se priorice la paz. El diálogo es sinónimo de cultura y de política. ¿Cuántos procesos de paz hemos firmado en nuestra historia y cuántas veces hemos vuelto a la violencia? Hay que cortar los ciclos de la venganza, de la retaliación, es lo mismo que cortar los ciclos de la violencia", apuntó Petro.
Entrega del Informe Final por parte de la Comisión de la Verdad
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En cuanto a las sugerencias, por ejemplo, se le pide al sector defensa transformar la doctrina militar acorde con el momento que vive Colombia para así desarrollar una nueva visión de la seguridad. Además, controles rigurosos a las actividades de inteligencia y una revisión al interior de las Fuerzas Armadas para garantizar el respeto por la dignidad humana.
En cuanto al narcotráfico, la Comisión hace un llamado al Estado colombiano para que lidere el debate internacional frente a la prohibición —pasar a una apuesta regulatoria—, para que acabe de una vez por todas la erradicación forzada de cultivos ilícitos y, de paso, todo proceso que incluya glifosato.
Por el lado del Acuerdo de Paz, la idea es consolidar la construcción de paz como un proyecto nacional, por lo que deberían existir los recursos suficientes para su implementación, sobre todo en los territorios. Esto va de la mano con la creación del Ministerio para la Paz y la Reconciliación.
También hay una invitación a la negociación con el ELN, guerrilla que hace poco, tras conocerse que Gustavo Petro sería el próximo presidente de Colombia, mostró su voluntad de sentarse a dialogar. Esta petición está basada en la experiencia de lo logrado con las extintas FARC y en el arduo trabajo por seguir conociendo la verdad de lo sucedido.
Por último, para garantizar la no impunidad, la Comisión sugiere una reforma a la elección del Fiscal General de la Nación —el presidente pone una terna y elige la Corte Suprema de Justicia— y analizar de fondo la reglamentación de las extradiciones para que quienes hayan cometido cualquier tipo de crímenes responda primero ante la justicia local y las víctimas. Es decir: que la administración de la justicia brinde garantías para el esclarecimiento de los hechos".
Vale la pena resaltar que existe un aparte para hablar de la transformación del campo colombiano, algo estipulado en el punto 1 del Acuerdo de Paz. Para la Comisión, hay que hacer una distribución equitativa de la tierra y una restitución efectiva para quienes sufrieron desplazamiento forzado y despojo.
¿Qué viene ahora?
Luego de lo sucedido este 28 de junio en el centro de Bogotá, la Comisión de la Verdad empezará una nueva travesía para atender medio centenar de eventos en los que explicará y hará promoción de los hallazgos del Informe Final. Serán días de ir de un municipio a otro y de aprovechar la ayuda de medios comunitarios para ampliar el mensaje en lugares en los que, por tiempo, será difícil estar.
Igualmente, se llevará a cabo una gira al exterior para que los exiliados conozcan de fondo los detalles del texto. El miércoles 29 se hará la entrega del Informe al Parlamento Europeo, en Bélgica, y luego habrá una gira en La Haya y Ámsterdam, en los Países Bajos. España y Suiza, otros de los países contemplados a lo largo de julio.
Este relato histórico estará habilitado desde este mismo martes 28 en una plataforma digital diseñada, que posteriormente hará parte del Museo de Memoria de Colombia. La Comisión hizo la salvedad que algunos testimonios y relatos serán restringidos, por petición de las mismas víctimas, al menos 30 años. Recordemos que la Comisión tendrá dos meses para entregar los capítulos restantes del Informe, pues su mandato termina el 29 agosto, un mandato que se encargó de que el país entendiera que existe un futuro siempre y cuando haya verdad.
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