sábado, 18 de septiembre de 2021

Explicador: El acuerdo de submarinos de propulsión nuclear de Australia está alimentando la ira en el país. Este es el por qué

El USS Indiana, un submarino de ataque de la Armada de los EE. UU. De propulsión nuclear, es escoltado cuando sale de Puerto Cañaveral en Florida el 29 de septiembre de 2018.

(CNN) -Estados Unidos y el Reino Unido compartirán tecnología y experiencia con Australia para ayudarla a construir submarinos de propulsión nuclear como parte de un pacto de defensa recientemente anunciado entre los tres países. La medida ha provocado furor en Francia , que ha perdido un acuerdo de larga data para suministrar a Australia submarinos a diésel.

Pero no solo los franceses están furiosos. Los grupos antinucleares en Australia, y muchos ciudadanos, están expresando enojo por el acuerdo, preocupados de que pueda ser un caballo de Troya para una industria de energía nuclear, a la que la nación se ha resistido durante décadas.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, habló personalmente con su homólogo australiano, Scott Morrison, para decirle que los barcos no serían bienvenidos en las aguas de su país, que ha sido una zona no nuclear desde 1984.
    Seis países (Reino Unido, EE. UU., China, Rusia, India y Francia) ya tienen submarinos de propulsión nuclear en su flota, y muchas de las principales economías desarrolladas, incluidos EE. UU. Y Reino Unido, utilizan energía nuclear en su combinación energética. En Francia, el 70% de la electricidad del país es nuclear .
      Entonces, ¿por qué tanto alboroto? He aquí por qué a algunos australianos les molesta este trato.

      ¿Cómo se fabrica la energía nuclear?

      La energía nuclear es el segundo mayor contribuyente mundial de electricidad baja en carbono después de la energía hidroeléctrica, según la Agencia Internacional de Energía. Representa alrededor del 10 por ciento de la electricidad mundial, generada por poco más de 440 reactores de potencia.
      La energía proviene de un proceso conocido como fisión nuclear, que implica la división de átomos de uranio en un reactor que calienta agua para producir vapor. Este vapor se utiliza para hacer girar turbinas, que a su vez producen electricidad.
      Los gránulos de uranio se enfrían después de pasar por un horno dentro de una planta nuclear en Ust-Kamenogorsk, Kazajstán.
      El uranio es un metal pesado que se encuentra en las rocas y los fondos marinos, y es un elemento poderoso. Una pastilla de uranio enriquecido, aproximadamente del tamaño de una goma de borrar en la punta de un lápiz, contiene la misma energía que una tonelada de carbón o tres barriles de petróleo, según GE Hitachi Nuclear Energy .
      Si bien el proceso en sí no genera emisiones, los gases de efecto invernadero generalmente se emiten durante la extracción de uranio y el proceso de enriquecimiento puede ser intensivo en carbono.

      ¿Es la energía nuclear renovable?

      La respuesta simple es no." La energía producida por las plantas de energía nuclear es renovable en sí misma, y ​​el vapor producido en los reactores nucleares puede reciclarse y convertirse en agua para ser utilizado nuevamente en el proceso de fisión nuclear.
      Los materiales utilizados en su producción, sin embargo, no son renovables: el metal es técnicamente finito. Pero existe el argumento de que se puede utilizar de forma sostenible; los recursos de uranio en todo el mundo son tan grandes que los expertos en energía no prevén que se agoten.
      Un incendio de hierba arde en una mina de uranio cerca de Mt Brockman en el Parque Nacional Kakadu, Australia, el 1 de septiembre de 2004.
      Sin embargo, muchos grupos que se oponen a la energía nuclear lo hacen debido a la destrucción ambiental causada por la extracción de uranio.
      Los gobiernos de muchas partes del mundo dependen de la energía nuclear para ayudar a descarbonizar sus economías. Es ampliamente considerado como una forma eficiente de producir electricidad y, dependiendo de la energía utilizada para extraer y enriquecer el uranio, podría ser una fuente de energía de cero emisiones.
      Más allá de sus credenciales de bajas emisiones de carbono, se considera que la energía nuclear tiene el factor de capacidad más alto de cualquier fuente de energía, lo que significa que las plantas nucleares funcionan a máxima potencia durante más tiempo que otros tipos. En los EE. UU., Funcionan a alta capacidad el 92,5 por ciento del tiempo, según muestran los datos del gobierno . Para el carbón, es alrededor del 40 por ciento y el viento es alrededor del 35 por ciento.
      La energía nuclear puede evitar que millones de toneladas de emisiones ingresen a la atmósfera cada año, en comparación con los combustibles fósiles.

      Suena genial. Entonces, ¿por qué tantos australianos están en contra?

      No es solo Australia. Varios países han frenado un mayor desarrollo de la industria de la energía nuclear desde el desastre de Fukushima en Japón en 2011. La planta de energía de Fukushima Daiichi perdió energía en un terremoto y un tsunami, lo que significó que los sistemas de enfriamiento fallaron, lo que provocó fusiones nucleares y explosiones de hidrógeno, y envió radiación dañina a la atmósfera. Partes de la ciudad permanecen fuera de los límites.
      Fue el peor desastre nuclear desde Chernobyl en 1986, cuando una prueba que salió mal provocó una explosión y un incendio, liberando cantidades devastadoras de material radiactivo en el aire. Treinta y una personas murieron en el accidente en sí, mientras que muchas más murieron por los efectos de la exposición a la radiación en los años siguientes, con algunas estimaciones de decenas de miles.
      Una manifestación contra el uranio en la Ópera de Sydney el 4 de junio de 1979.
      Pero el movimiento antinuclear de Australia se remonta más atrás que eso, a un fuerte movimiento de protesta en la década de 1970. Esto surgió en gran parte debido a las preocupaciones sobre los impactos ambientales de la extracción de uranio, del cual Australia tiene enormes reservas, pero también debido a las preocupaciones sobre los riesgos para la salud pública, particularmente entre las comunidades que viven cerca de las instalaciones propuestas.
      También existen preocupaciones sobre cómo almacenar de forma segura los desechos nucleares. Las explosiones o fugas de desechos almacenados también pueden afectar la salud humana, aunque estos desastres son mucho menos comunes de lo que eran antes.
      En 1977, el Movimiento Contra la Minería de Uranio en Australia recogió 250.000 firmas para una moratoria en la extracción del metal, a pesar de que no se estaba utilizando energía nuclear en el país. Pero Australia todavía extrae el metal hoy y lo exporta para generar energía nuclear en otras partes del mundo.
      Existe una creciente presión política en Australia proveniente de los líderes de los liberales, que es el partido conservador de Australia, para comenzar a usar la energía nuclear. Sin él, algunos argumentan, llegar a cero neto para 2030 será imposible. Se ha resistido a la energía nuclear en gran parte porque ha tenido abundantes reservas de carbón y gas, pero Australia está bajo presión para reducir su uso de combustibles fósiles.
      Al anunciar el nuevo acuerdo, Morrison dijo que Australia no estaba buscando desarrollar "capacidad nuclear civil", que incluiría plantas de energía nuclear. Pero el líder del Partido de los Verdes, Adam Bandt, criticó el acuerdo en un tuit por poner "Chernobyls flotantes en el corazón de las ciudades de Australia", diciendo que "hace que Australia sea menos segura".
      Bob Brown, un exlíder de los Verdes que hizo campaña contra los buques de guerra nucleares que llegaban a Tasmania en la década de 1980, dijo a Financial Review el jueves que el acuerdo acercaba al país al desarrollo de una industria de energía nuclear y advirtió sobre una reacción violenta.
      "Creo que es muy cobarde lo que ha hecho el gobierno", dijo Brown. "Se tomó una decisión sin hacer referencia al público, sabiendo que el público se opondría".

      ¿Y cuál es la postura de Nueva Zelanda?

      Nueva Zelanda es uno de los pocos países desarrollados que no tiene ningún reactor nuclear. También tiene una zona nuclear cero que evita que las armas nucleares o los barcos nucleares entren en su territorio.
      Una planta de energía nuclear en Gundremmingen, Alemania, el 26 de febrero de 2021. Alemania está reduciendo su uso de energía nuclear, mientras que Nueva Zelanda todavía la prohíbe por completo.
      En septiembre de 1978, el gobierno de Nueva Zelanda publicó una Comisión Real de investigación sobre energía nuclear, y se tomó la decisión de que el país utilizara sus propios recursos para producir electricidad, en lugar de implementar plantas nucleares.
      La energía hidroeléctrica, que aprovecha la energía del movimiento del agua, proporciona ahora el 80 por ciento de la energía del país, y la inversión en plantas nucleares todavía no se considera rentable. El costo inicial de construir instalaciones de energía nuclear es extremadamente alto, según la Asociación Nuclear Mundial.
        Sin embargo, la principal razón de la oposición de Nueva Zelanda a la energía nuclear es, como en Australia, la opinión pública y las preocupaciones sobre la seguridad y la eliminación de desechos nucleares.
        La postura antinuclear de Nueva Zelanda se aplica a la energía nuclear, los buques de propulsión nuclear y las armas nucleares.

         

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