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En Estados Unidos ha habido más de un millón de muertes en exceso durante la pandemia, dijo el periódico británico The Guardian en un informe reciente.
Los fallecimientos fueron consecuencia principalmente de la COVID-19, así como también como consecuencia de la atención médica tardía y el desbordamiento del sistema de salud, según el informe, que citó datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
De acuerdo a la misma fuente, murieron al menos 923.000 estadounidenses por la COVID-19, y hubo otras causas, como enfermedades cardíacas, hipertensión y Alzheimer, que contribuyeron a elevar la cifra total de defunciones.
El exceso de víctimas también se conoce como muertes prematuras o "tempranas", explicó The Guardian, y agregó que si bien la mayoría de quienes murieron eran personas de 65 años o más, a muchos de esos estadounidenses les quedaban muchos años por delante.
Para calcular el exceso de muertes, explicó The Guardian, se hace la comparación con cifras de los años anteriores: en 2019, hubo 2,8 millones de fallecimientos en Estados Unidos, y en 2020, 3,3 millones.
Muchos estadounidenses tardaron en buscar atención médica durante la pandemia, y otros sufrieron el deterioro de la calidad de la atención a medida que el sistema de salud del país comenzó a sobrecargarse por la pandemia de COVID-19, detalló el informe.
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