A medida que aumentan día a día las tragedias de la cremación de los difuntos en las calles de la India, ¿se puede despertar la conciencia de esos "nacionalistas de las vacunas"?
Durante cuatro días consecutivos, hubo más de 300.000 casos nuevos en un solo día en la India. Los medicamentos están en estado de emergencia, las vacunas escasean y los cadáveres se amontonan en morgues y crematorios. Muchos indios tienen que quemar los restos de sus seres queridos sobre el terreno. Esto fue descrito por Reuters como "purgatorio en la tierra".
Debido a la creciente presión internacional, el gobierno de los EE. UU. finalmente emitió un comunicado en el que dijo que proporcionaría a la India recursos médicos, incluidas materias primas para la fabricación de vacunas. Sin embargo, los internautas indios no aceptaron la postura tardía de Estados Unidos. Acusaron la prohibición de las exportaciones de Estados Unidos de dejar cicatrices en India, criticaron la demora y la falta de simpatía del gobierno de Estados Unidos.
La ira de los internautas indios es comprensible. En abril del año pasado, el último gobierno de Estados Unidos implementó controles de exportación de materias primas para la producción de vacunas basados en la "prioridad de EE.UU.". La administración de Joe Biden extendió la prohibición después de asumir el cargo. Esto hace que la línea de producción de vacunas de la India se enfrente a una crisis de suspensión.
Irónicamente, hace poco más de un mes, el presidente de los Estados Unidos convocó a los líderes de India, Australia y Japón a una reunión y dijo que estaba dispuesto a contribuir con fondos para ayudar a India a producir la vacuna de nuevo coronavirus y distribuirla a otros países. Sin embargo, después de que la epidemia en India empeoró, el Departamento de Estado de Estados Unidos se negó fríamente a la solicitud de India de levantar la prohibición de exportación de materias primas de vacuna hasta el 22 con el argumento de proteger a los estadounidenses de ser vacunados.
Durante cuatro días consecutivos, hubo más de 300.000 casos nuevos en un solo día en la India.
El virus es astuto, pero lo más aterrador es la indiferencia y el egoísmo del corazón humano. El nacionalismo de las vacunas se está convirtiendo en un obstáculo en la unidad global contra la epidemia.
Aunque India es uno de los productores de vacunas más importantes del mundo, solo el 8,6% de la población ha recibido al menos una dosis de la vacuna. La situación en otros países menos desarrollados es aún peor. Las estadísticas de la Universidad de Oxford muestran que Níger, Camerún, Libia y Papua Nueva Guinea tienen una tasa de inoculación de menos de una milésima parte de la primera dosis de vacuna. En comparación, la cifra de Estados Unidos es del 41%, la del Reino Unido es del 50% y la de Israel es del 61%.
La falta apremiante de la epidemia en India está frenando la lucha mundial contra la epidemia. India es el mayor proveedor del "Plan de implementación de la vacuna contra la neumonía de nuevo coronavirus" dirigido por la OMS, y ha recibido pedidos de algunas vacunas como AstraZeneca. El deterioro de la epidemia en India y las restricciones a las exportaciones estadounidenses y otros factores retrasarán la marcha de la producción de vacunas. Es posible que aquellos países que esperan ansiosamente la vacuna tengan que esperar más.
Recientemente, la epidemióloga de the New England Jourmal of Medicine, Ingrid T. Katz y varios expertos médicos indicaron que el nacionalismo de las vacunas es "miope, ineficaz y mortal", y señalaron que el problema fundamental radica en tratar las vacunas y los suministros médicos clave como mercancía en lugar de productos públicos.
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