miércoles, 1 de diciembre de 2021

 El COVID-19 puede causar muerte fetal, revela estudio israelí.

01-12-2021. 

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TEL AVIV (Sputnik) — Gestantes con coronavirus pueden transferir la enfermedad a la placenta y al bebé, lo cual puede causar la muerte al feto, según un nuevo estudio realizado por investigadores israelíes del Hospital Asuta, de la ciudad de Ashdod.
Tras dos años de crisis sanitaria, los expertos coinciden en que las mujeres embarazadas son más vulnerables al virus SARS-CoV-2, y, de acuerdo con varios estudios realizados en diferentes lugares del mundo, el riesgo de muerte fetal en mujeres con coronavirus es el doble en comparación con aquellas que no tienen la enfermedad.
Sin embargo, hasta ahora, no se había realizado ningún estudio que examinara las causas de la muerte fetal intrauterina.
El estudio dirigido por el profesor Eran Barzilay, director de la Unidad de Ultrasonido de Obstetricia del Hospital Asuta, examinó a un grupo de cuatro mujeres que experimentaron muerte fetal intrauterina al poco tiempo de haber sido diagnosticadas con coronavirus.

Ataca a la placenta

Durante el estudio, los investigadores realizaron una serie de análisis que incluyeron pruebas patológicas de la placenta y también pruebas de PCR en la madre, el feto y la placenta, y en todos los casos de muerte fetal intrauterina observaron daño sustancial al tejido placentario.
"Lo que llama poderosamente la atención en todos estos casos es que se encontró más carga viral en el feto que en la misma madre portadora del virus, y en todos los casos de muerte fetal se encontró un daño sustancial en el tejido placentario", resaltó el médico en comunicado.
"Hay varios virus que pueden causar la infección del feto cuando la madre está contagiada", dijo el profesor Barzilay. "Pero nunca habíamos visto este tipo de daño en la placenta por un virus. Parece ser algo específico del coronavirus".
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No se encontró prueba de infección en el feto o en la placenta dentro del grupo de madres que no sufrieron muerte fetal, según el estudio.

Efecto directo del virus

Los investigadores compararon las placentas de las mujeres que perdieron a sus bebés con las que no lo hicieron pero que también fueron diagnosticadas con COVID-19 y encontraron que no había coronavirus en las placentas que alimentaban a los bebés vivos.
El estudio concluye que la infección causó la muerte fetal, y que la muerte fue causada directamente por la placenta, porque en las mujeres infectadas con COVID-19, incluso si la carga viral de su caso era pequeña, la placenta aparecía dañada de manera desproporcionada a esa carga viral.
Tanto Israel como el resto el mundo ha visto a muchas mujeres embarazadas desarrollar la enfermedad del coronavirus en estado grave y en la mayoría de los casos las gestantes se han visto obligadas a dar a luz a sus bebés prematuramente, lo que, a su vez, puede causar problemas de desarrollo o incluso poner en peligro la vida del recién nacido.
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De acuerdo con el estudio de Asuta, el COVID-19 puede representar un "riesgo severo" para las mujeres embarazadas, especialmente en su tercer trimestre.
Ninguna de las mujeres que perdieron a sus bebés, involucradas en el estudio, había recibido la vacuna contra el coronavirus, y, aunque hay pocos casos de bebés que desarrollan la enfermedad grave, vacunarse les da a los recién nacidos "un beneficio adicional". Así lo demostraba otro estudio israelí reciente que determinaba que las gestantes que se vacunan pueden transmitir algo de inmunidad a sus recién nacidos.
A pesar de que la muerte fetal es poco frecuente, según indican los investigadores, recomiendan a las futuras madres que se protejan contra la enfermedad y se vacunen, al igual que lo hace consensuadamente la clase médica y política del país.
El estudio fue aceptado para su publicación por la Revista Internacional de Ginecología y Obstetricia.

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