BIENVENIDO A ESTADOS
UNIDOS
Compilador Germán Saltrón
Negretti.
Philip Alston, Relator de la
ONU para la Pobreza, realizó una pregunta importante. ¿Pueden los
estadounidenses disfrutar de los derechos humanos fundamentales si no pueden
cumplir con los estándares básicos de vida? Alston solicita saber por qué 41
millones de estadounidenses viven en la pobreza. The Guardian se unió a él en
una misión especial de dos semanas en el corazón oscuro de la nación más rica
del mundo.
El tratamiento inadecuado ha
puesto a la población en riesgo de enfermedades que durante mucho tiempo se
creían extintas en los EE. UU. Lowndes County, Alabama, 9 de diciembre 2017.La
ignorancia de Trump sobre los derechos humanos, combinado con la amenaza
republicana de recortar los programas de asistencia social el año próximo a fin
de pagar algunos de los recortes de impuestos para los ricos que están
apresurándose en el Congreso continuará perjudicando a los afroamericanos de manera
desproporcionada. Los negros son el 13% de la población de los EE. UU. El 23%
de ellos están oficialmente en la pobreza y el 39% de las personas sin hogar.
El elemento racial de la crisis
de pobreza de EE.UU, se ve claramente que en el sur profundo del país, donde
las heridas abiertas de la esclavitud siguen sangrando. El relator especial de
la ONU eligió como su siguiente parada el “Cinturón Negro”, el término que
originalmente se refería al rico suelo oscuro que existe en una banda a través
de Alabama, donde su población es afroamericana mayoritaria.
El vínculo entre la tierra
fértil y la demografía no fue una coincidencia. Se descubrió que el algodón
prosperaba en esta tierra fértil, y esto generó un gran comercio de esclavos para
recoger la cosecha. Sus descendientes aún viven en el Cinturón Negro, todavía
sumidos en la pobreza entre los peores de la Unión. Existen numerosas maneras
de analizar el presente estado lamentable de la comunidad negra de Alabama.
Miles de familias todavía no tienen acceso a servicios de saneamiento y
continúan las personas viviendo entre alcantarillas abiertas e inmundas del subdesarrollado.
La crisis fue revelada por
The Guardian a principios de este año para haber llevado a una endemia continua
de anquilostoma, un parásito intestinal que se transmite a través de los
desechos humanos. Se encuentra en África y el sur de Asia, pero se suponía que
se había erradicado EE. UU. Sin embargo,
aquí el gusano todavía está, chupando la sangre de la gente pobre, en sitio
donde nació el fiscal general de Trump, Jeff Sessions.
El problema es muy grave en
el condado de Lowndes, una comunidad negra mayoritaria que fue el epicentro del
movimiento por los derechos civiles y donde se inició la marcha de derechos
electorales de Martin Luther King de Selma a Montgomery en 1965. Philp Alston
habló con un residente. Muchas familias en los condados de Butler y Lowndes
eligen vivir con sistemas de alcantarillado abiertos hechos de tubería de PVC. A
pesar de su orgullosa historia, Catherine Flowers estima que el 70% de los
hogares en el área “canalizan directamente” sus desechos directamente sobre
terreno abierto, o tienen tanques sépticos defectuosos incapaces de lidiar con
las fuertes lluvias.
Cuando el Centro para la
Empresa Rural de Alabama (Acre), presionó a las autoridades para que hicieran
algo al respecto, los funcionarios invirtieron $ 6 millones para extender los
sistemas de tratamiento de residuos a negocios principalmente blancos al tiempo
que eludían hogares abrumadoramente negros. “Ése es un ejemplo evidente de
injusticia”.
Walter, un residente del
condado de Lowndes que pidió no dar su apellido por temor a que se le cortara
el suministro de agua como represalia por hablar, vive con las consecuencias
diarias de tal descuido público. “Obtienes una buena lluvia fuerte y regresa a
la casa”. Es una forma educada de decir que las aguas residuales gorgotean en
el fregadero de su cocina, lavamanos y baño, llenando la casa de un hedor
dulzón.
Dadas estas circunstancias,
¿qué piensa él de la ideología de que cualquiera puede hacerlo si lo intentan?.
“Supongo que podrían hacerlo si tuvieran la oportunidad”, dijo Walter. Hizo una
pausa y luego agregó: “A la gente no se le da la oportunidad”. Si hubiera
nacido blanco, ¿ya se habrían resuelto sus problemas de alcantarillado?
Como ciudadanos
estadounidenses, tienen el derecho a una vida decente, la libertad y la búsqueda de
la felicidad. Es solo que están rodeados de estanques de excrementos. Esta
semana, el Black Belt se retractó. El martes se agregó una nueva línea a ese
gráfico simple, que muestra exactamente la misma media luna en Alabama, excepto
que esta vez no era negro sino azul. (Tomado
de The Guardian / Traducción de Cubadebate)
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