Las medidas impuestas para frenar la propagación del COVID-19 en Francia causaron un embotellamiento récord en la región parisina.
A pocas horas de la entrada en vigor de las nuevas reglas de confinamiento, se registró una congestión de automóviles de más de 700 kilómetros en los ejes de la región de la capital francesa, detalló el medio Le Parisien.
Los residentes de París llenaron las calles con sus autos al abandonar la ciudad la noche del 29 de octubre, antes del inicio del confinamiento nacional, decretado por el Gobierno galo. Según los medios franceses muchos parisinos han dejado la urbe para pasar el segundo lockdown francés en el campo.
Las medidas restrictivas con motivo del COVID-19 han entrado en vigor a primera hora del 30 de octubre. Se ha ordenado a los ciudadanos que se queden en casa, excepto por motivos laborales esenciales o razones médicas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que el país corre el riesgo de ser "abrumado por una segunda ola (de contagios) que sin duda será más dura que la primera".
Las muertes diarias por COVID-19 en Francia han alcanzado su nivel más alto desde abril. El día anterior al inicio del confinamiento nacional, las autoridades francesas informaron de 47.637 nuevos casos y 250 nuevos fallecidos a raíz de la enfermedad.
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