El presidente de Rusia, Vladímir Putin, durante la reunión con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que nadie sabía la ubicación de los soldados turcos en la operación antiterrorista del Ejército sirio.
"Nadie sabía dónde se localizaban los soldados turcos", afirmó el mandatario ruso.
Además, Putin transmitió sus condolencias a Erdogan por los 36 militares del país otomano muertos en Siria.
"Quisiera expresarle mis profundas condolencias por la muerte de los militares turcos en Siria", dijo Putin.
El mandatario ruso agregó que "la pérdida de vidas es siempre una tragedia".
"Tenemos que hablar sobre la situación actual para que no vuelva a ocurrir algo similar y para que esto no quebrante las relaciones ruso-turcas", señaló.
Por su parte, Erdogan expresó la confianza en que la reunión que mantiene este 5 de marzo con Putin permite estabilizar la situación en la provincia siria de Idlib.
"Sin duda alguna, nuestra reunión sobre Idlib tiene gran importancia, (...) creo que las medidas que se acordarán hoy y nuestras decisiones aliviarán la situación", dijo Erdogan antes del inicio de las negociaciones con Putin, que se celebran en el Kremlin.
El presidente turco subrayó que las relaciones entre Ankara y Moscú "alcanzaron su nivel máximo, eso se refiere a la industria de defensa, las relaciones comerciales, etcétera".
"Consideramos que el principal objetivo es promover y desarrollar nuestras relaciones, creo que lo conseguiremos", afirmó.
Está previsto que primero Erdogan y Putin sostengan un cara a cara, tras lo cual a las negociaciones se sumarán las delegaciones.
Los dos líderes acordaron mantener estas consultas después de agravarse la situación en Idlib a finales de febrero pasado, cuando el grupo terrorista Hayat Tahrir al Sham (anteriormente conocido como Frente al Nusra, prohibido en Rusia) lanzó ataques masivos en esa zona, a los que el Ejército sirio respondió con un bombardeo aéreo.
© REUTERS / LA PRESIDENCIA TURCA
Rusia defendió los ataques del Ejército sirio contra los terroristas, acusando a Turquía de incumplir algunos de sus compromisos clave para solucionar la situación en Idlib, en particular en la parte de separar a los terroristas de la oposición armada que esté dispuesta a dialogar con el Gobierno sirio en el marco de un proceso político.
Turquía respondió a los ataques del Ejército sirio con una operación de represalia, Escudo de Primavera. Además, anunció que no puede contener el flujo de migrantes y refugiados, a los que permitió cruzar libremente sus fronteras en dirección a Grecia y Bulgaria.
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